Ruta de gran interés natural por la gran diversidad de especies que habitan la zona. Destacan especialmente la fauna herpetológica (anfibios y reptiles) de los puntos de agua, las aves rupícolas y varios endemismos de flora bética como la lavanda lanuda, el piorno de crucecitas, el narciso bético, el labiérnago bético o la linaria anticaria.
Partiremos desde la fuente de las Rozuelas, situada en el Km 6,4 de la carretera de Montefrío, en dirección al repetidor por la antigua cañada real del Gallego. En el límite de los 1.350 m, el camino hace un giro cerrado y la pendiente se pronuncia. Dejaremos entonces la pista y atravesaremos una pequeña depresión, que tras subirla nos llevará por un sendero hasta las Fuentezuelas (un nacimiento con agua de calidad excepcional -foto a pie de página-). Dejaremos al lado derecho una característica alberca tradicional, y siempre bordeando la sierra, atravesaremos un terreno formado por dolinas y matorrales de espinares. Junto a unos viejos olmos muertos por la grafiosis, encontraremos una fuente y la segunda señal de la ruta.
Seguiremos el camino hacia la hoya del Belezal. Tras pasar las Yeseras (1.572 m) empiezan a sucederse las primeras canteras, y continuamos el trayecto ganando altura hasta que llegamos al Belezal. Esta hoya es una enorme depresión, muy conocida entre los habitantes del municipio por ser una excepcional zona para buscar la seta de cardo (pleurotus eryngii). Tras atravesar la hoya, y después de un pequeño cruce en el cual tenemos que tomar el ramal izquierdo, nos situaremos en el puerto de Artesilla, donde el camino desciende hasta pasar cerca de otra pequeña depresión, la hoya de los Endrinos. El camino continua hasta reunirse con el ya andado anteriormente. Nos bastará con descender hasta la pista asfaltada y, posteriormente, hasta la carretera donde acaba esta ruta. |